Visitamos el Centro José Guerrero expectantes frente a lo que Ãbamos a encontrar allÃ. Una exposición del granadino Sergio GarcÃa junto a Max y Ana Merino.
Esta exposición pretende dar un nuevo enfoque al cómic sacando del papel a los personajes encuadrados en viñetas y asà dar vida a las paredes del Museo, con una historia que nos ha hecho pensar en cada rincón del Centro.
Nada más entrar, nos llama la atención un libro de color negro titulado «Vida de Ubrut, encargado de mantenimiento» y estampado en una pared totalmente blanca. De él sale un personaje, Ubrut, que nos acompañará a lo largo de la visita y con una misión muy importante: mantener limpia la lÃnea negra sobre la que se sostiene y sobre la que se desarrollará la historia a lo largo de la planta primera, escaleras y segunda planta del Centro. Aquà es cuando Ubrut comienza a interactuar con otros personajes, pero no en la misma pared sino con unos peculiares personajillos que aparecen en la pared de enfrente. Ha sido un momento para pensar lo que Ubrut querÃa decir con su diálogo, hasta descubrir que en realidad no hablaba al espectador sino a los dos personajes de la pared contraria.
Una vez acabado el paseo por la historia de estas paredes y personajes, el hilo desemboca en un viaje en metro que nos transporta al otro lado del charco, Nueva York.
En esta segunda planta del Centro, ya comenzamos a observar las diferentes viñetas un tanto peculiares, dibujos que en tan pocos metros cuadrados nos cuentan la vida de varios personajes, principales y secundarios, que irán secuenciando la exposición para transmitirnos sus vivencias y descifrar la trama. Pensar en cada uno de los detalles, darles una explicación y relacionarlos con cada una de las viñetas, ha sido todo un trabajo de imaginación y descubrimiento para ponernos en el lugar del protagonista y el autor de la historia. Pablo, nuestro guÃa, les ha hecho pensar en cada viñeta para reflexionar sobre cada uno de los elementos y comenzar a elaborar una historia de principio a fin. Al principio fue algo complicado ya que solo veÃan elementos individuales pero en la trayectoria de la visita, fueron hilando hasta ir montando historias que se acercaban mucho a lo que los autores y protagonistas querÃan transmitir.
El trabajo de estos artistas, basado en el trayecto de los dibujos y la narración multilineal, hace atrapar al espectador hasta introducirse en la historia mientras paseas por el Museo.
Una exposición muy recomendable para volver a visitar en familia donde cada uno de los integrantes de la clase puede hacer de guÃa y transmitiros todo lo que aprendimos de «Viñetas desbordadas».
Jorge