Con resaca del viernes de carnaval, iniciamos a tope la semana. Espero que hayáis disfrutado de los vídeos de carnaval con las actuaciones de los niños y de los no tan niños. Fue un día maravilloso y a pesar de las circunstancias, lo pasaron genial.
Hoy no se habla de otra cosa… fue un viernes muy divertido.
Vienen muy cariñosos, risueños, independientes (está feo que lo diga pero… con lo que me gusta que me pidan brazos, achucharlos…) y hasta ¨habladores¨ nada queda de aquellos primeros días e incluso semanas de adaptación, se nota que nos gusta estar en el cole (o eso creo).
Cada día interactúan más entre ellos, juegan, se tocan, comparten cosas, cambian sus zapatillas… (espero que no me cambien a mi por otr@ profe… sniff sniff).
Las rutinas las tienen tan asimiladas, que saben lo que se debe hacer cuando digo <vamos a lavarnos>, <vamos a cambiarnos los zapatos>… la cosa marcha a las mil maravillas.
Escalar se ha vuelto en el deporte más practicado en clase… pero además a la velocidad del viento.
Entre bloques de psicomotricidad, cocinita (le encanta) y pelotas, pasamos la mañana.
Los lunes hay pasta para el almuerzo y eso significa llevar varios recuerdos a casa en la ropa… pero os aseguro que disfrutan mucho.
Esta semana es más corta, es lunes con sabor a martes. Ya que, el viernes, no hay clase.
¡Hasta mañana, un besazo y abrazo grande!.
Alba Cala.