Hoy hemos disfrutado como nunca con un taller sensorial con harina en el que nos «sumergimos» literalmente en este elemento que nos sorprende y apasiona.
Comenzamos metiendo la mano en el paquete y sintiendo el tacto suave de la harina en nuestros dedos y poco a poco vamos llenando el suelo de la clase que queda blanco como si de nieve se tratara.
Pintamos con los dedos en tan curioso lienzo, «nadamos», paseamos y lanzamos al viento¡ Qué caras!.
Para poder recoger la clase nos sentamos a pintar sobre folio primero con rotulador y finalizamos con ceras blandas observando los diferentes trazos y colores.
¡ Un día estupendo!
Nuria García Pallás.