El periódico en el tercer ciclo de primaria

El reto de la creación de un diario o periódico escolar en el tercer ciclo está en la creación del periódico en una jornada escolar.

A primera hora de la mañana, los grupos que forman el equipo redactor, se reúnen para decidir las noticias que pueden ser de interés para los compañeros; noticias del colegio, entrevistas, acertijos, curiosidades, pasatiempos, noticias de actualidad (consultando el periódico del día) o noticias que sepan del mundo para narrar, para repartirse el trabajo, investigar y consultar en el colegio.

Después de ello, se ponen manos a la obra y empiezan a redactar el periódico. Cada paso que vayan dando, deben consultarlo con los tutores del ciclo para aprobarlo, ellos llevan el papel de director del periódico.

Los periodistas deben maquetar toda la información, revisar la ortografía y publicarlo en papel y en el blog.

El reto va superándose publicando día a día un periódico y trabajando como una auténtica redacción.

El resultado lo mostramos en los siguientes enlaces:

Lunes 24 de enero

5º EPO:  EL ALQUERIANO

6º EPO: Mola Mazo!

Martes 25 de enero:

6º EPO: Alquería news

Miércoles 26 de enero:

5º EPO: Neutro

Jueves 27 de enero:

5º EPO: El rincón del estudiante

6º EPO: Alquería «Taims»

Martes 1 de febrero:

5º EPO: King-Kong

Miércoles 2 de febrero:

5º EPO: HERT

Lunes 7 de febrero:

6º EPO: alqueri@.es

El Cid contado a los niños

En el tercer ciclo seguimos fomentando la animación a la lectura. En este caso vamos a llevar a cabo una tertulia conjunta entre 5º y 6º, para el 21 de diciembre todos habremos leído el libro, investigado sobre este personaje, sus aventuras y así comentar e intercambiar opiniones e impresiones entre todos.

Queremos acercar a los niños lecturas tradicionales, aventuras e historia de personajes tan conocidos como el Lazarillo de Tormes que leímos el curso pasado.

El Cantar de Mio Cid es un poema épico escrito en verso que nos ha llegado copiado en hojas de pergamino del siglo XIV. Al final de la obra se dice que la copió en 1207 Per Abbat (Pedro Abad). De su manuscrito se copiaría a su vez el que nos ha llegado a nosotros, que se conserva en la Biblioteca Nacional. No se sabe cuándo fue compuesta la obra ni quién fue su autor. Cuenta lo que hace Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador, cuando el rey Alfonso VI lo destierra, en 1081. El Cid, un caballero de la corte y valiente caballero, muere en 1099. Nos sentimos especialmente orgullosos de acercar a los niños y niñas el Cantar del Cid, para que puedan degustar y disfrutar la gran obra que abre la historia de nuestra literatura, conocer a sus personajes y sus aventuras, tal como probablemente las difundieron los juglares hace ya tantos siglos… El Cantar de Mio Cid narra batallas en donde se muestran el valor y la astucia del Cid, pero también nos describe escenas tiernas y emotivas entre el héroe y su mujer e hijas.

El reloj

¿Que podría ser el reloj?

¿Un círculo con  números alrededor?

¿Tal vez dos palos que señalan la hora?

O el tiempo en que envejece una señora.

Puede que el sello de una tienda

o un adorno de cualquier prenda.

Tal vez una pulsera muy cara

o a lo mejor de la moneda su cara.

Puede que un plato en la pared

o tal vez la sombra del reloj de Mohamed.

Yo creo que todas dicen la verdad,

pero no sé cuál tiene más de realidad.

Autora: Elena Alcina Matesanz

6º EPO

La vergüenza

Es un sentimiento que te paraliza, te deja en un mal  momento.

Es muy difícil luchar contra ella. La vergüenza no existe por sí sola: los seres humanos la fabrican.

Todo el mundo ha sentido esto alguna vez, y a nadie le ha gustado esa sensación, es realmente humillante.

Hay veces que por pura vergüenza no hacemos algo, o dejamos de hacerlo, o simplemente no nos atrevemos a hacerlo.

En cambio alguna gente lucha para vencerla; y lo hace, porque la vergüenza es algo que tú mismo te estás haciendo, como si te estuvieras haciendo daño a ti mismo.

Para mí es mucho peor que te duela algo: una pierna, la cabeza…

Yo intento no fabricar este sentimiento.

                                                 AUTOR:  DANIEL DEL BOT JEREZ

Crónica de «un día en Alquería»

A las siete en punto de la mañana me levanto de mi cama y me aseo. Estoy alegre, me espera un día en mi colegio, Alquería. Más tarde, salgo de mi casa en coche, todavía no se ha hecho de día. Estoy cansado, pensativo y me quedo adormilado sobre el blando apoya-brazos hasta que llego al colegio.

Al llegar, me levanto del asiento, cojo mi mochila y le doy un beso a mi madre o a mi padre y me voy dando un paseo por el precioso jardín del colegio, tan verde, tan colorido y tan acogedor, con sus ruidos de los pájaros cantado y el sol amaneciendo. Después, cojo una flor y me la guardo en el bolsillo derecho de mi pantalón para dársela a la chica más bella que encuentre.

Cuando entro, recorro el pasillo de secretaría y miro todos los carteles y anuncios que hay puestos. Más tarde, abro la puerta del comedor que me recibe con un gran ambiente, calorcito y sobre todo, me recibe con un olor maravilloso a tostadas. El olor me lleva hasta la mesa, donde tranquilamente, me siento a desayunar y a hablar con algunos de mis amigos. Luego, vienen nuestras cocineras, las mejores del mundo, a traernos esas tostadas de mantequilla que todos esperamos y nos las tomamos juntos junto a un vaso de leche y algunas galletas. Al terminar, después de dejar la taza y la servilleta en su respectivo sitio, me voy a jugar con mis amigos, o a dibujar, o también, a hacer deberes atrasados o que no me han dado tiempo a hacer.

Después viene el Teacher Manolo, profesor de inglés, bibliotecario y el que abre las puertas por la mañana para que podemos salir del comedor. Si hace mucho frío o ha llovido, nos vamos a las clases, si no, salimos a jugar al patio. Aquí noto el fresquito de una mañana primaveral y empiezo a correr velozmente para no parar de sentirlo. Al acabar el patio, todos nos dirigimos hacia las clases, que empiezan a las nueve.

Casi todos los niños de mi clase son muy educados, pero no todos, algunos se distraen jugando en vez de trabajar en clase. Yo creo que no soy ninguno de ellos, ya que me gustan mucho las clases, unas más que otras, pero me gustan. También, todos lo profesores me caen bien, pero como acabo de decir, unos más que otros. Por eso, un día en Alquería, mi colegio, es algo especial, es un día que se te pasa volando, o muy lento. Puedes tener días buenos y puedes tener días malos, pero siempre son días especiales, en los que a la vez de aprender, te diviertes con tus amigos o con tus profesores, con quien sea. Un día en Alquería es total, por eso, seguro que lloraría si me tuviesen que cambiar de colegio, por alguna emergencia o imprevisto, me pondría muy triste, no querría separarme de los amigos de toda una vida o de los profesores que me han enseñado y dado tantas cosas en la vida, no sabría, sería como una bomba nuclear apunto de explotar, no sabría expresarme.

Además, los profesores de Alquería son como amigos, compañeros. Te ayudan en todos tus problemas, sean de clase o no, a ellos son a los que busco cuando tengo algún problema.

Por eso, los niños que no van al colegio, son niños desafortunados, pero no solo porque no puedan aprender, sino también por todo lo que he explicado, no tener muchos amigos, no poder disfrutar, etc.

En teoría, a ningún niño le gusta el colegio, pero si lo miras en el fondo, el colegio es el sitio más chulo del mundo, un lugar lleno de fantasía, diversión y cosas nuevas.

En resumen, un día en Alquería, el colegio más chachi del mundo, es superchulo y te lo pasas genial, ya que allí hacemos cosas divertidas. Aunque si  os digo la vedad, a pesar de que sea el mejor colegio del mundo, muchas veces estoy deseando salir por fin al recreo para que me de el aire un poco en el cuerpo, después de dos horas sentado en una silla.

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Gonzalo

11 años

6º EPO