… entonces, como no consiguía derribar la casa, decidió entrar por la chimenea, y mientras entraba, los cerditos salieron de la casa aunque el lobo se dio cuenta antes de entrar en la chimenea porque los lobos son muy astutos.
Entonces fueron a casa de su mamña que abrió la puerta y cuando el lobo iba a entrar, la mamá la cogió y empezó a darle con una sartén en la cabeza hasta dejarlo mareado, y aquel lobo no volvió a comer nunca más cerditos.