… el lobo sopló y sopló y la casa de madera derrumbó. El cerdito se fue corriendo a la casa de ladrillo de su hermano, el lobo se fue a la casa de ladrillo, sopló y sopló pero no pasó nada, sopló y sopló. Se estaba poniendo morado, hasta que decidió subir por la chimenea y se cayó en el fuego, se estaba quemando el culo, y los tres cerditos decidieron ponerle, ketchup, mostaza y salsa barbacoa, lo cocinaron a fuego lento y se lo comieron hasta que explotaron los tres de comer tanto.