JUEGOS DE ANTAÑO
Cuca y Juan Luis, abuelos de Mateo A, han sido los encargados de llevarnos unas décadas atrás a través de los juegos de mesa.
En primer lugar, Cuca, se ha centrado en enseñarnos algunos juegos de cartas con los que ellos disfrutaban las tardes con los amigos y la familia. Estos juegos han sido EL BURRO y CULO SUCIO.
Tras la exhaustiva explicación de las reglas de ambos juegos, solo queríamos ¡JUGAR! ¡Ah, lo más importante. El juego es para divertirse y nadie se puede enfadar!
Ahora es nuestro turno, nos toca jugar y disfrutar con ellos. Así que nos distribuimos en grupos, repartimos cartas y a jugarrrrrrrrrr.
Cuca nos había explicado que quién perdía debía «una prenda», que es como un reto que debes hacer al acabar el tiempo de juego. Y eso hemos hecho, quien ha perdido ha tenido que hacer una postura de yoga durante unos segundos, tumbarse en el suelo, bailar la conga…
Luego Juan Luis nos explica el juego de LOS PALOS, que se puede juga en cualquier lugar, no hace falta leer, ni escribir, ni contar… hace falta estrategia, planificación y 15 objetos. Ha sido de lo más interesante y sólo unos pocos lo conocían, así que nos animamos muy rápido a jugar y ¡nos encanta este juego!
PREMIER ATELIER
bolsitas de hierbas aromáticas
Mati, Pepita y Ana, abuelas de Vega y abuela de Carlos respectivamente, son unas expertas en el tema de la costura.
Nos cuentan cómo empezaron a coser y quién las enseñó, que normalmente venía por sabiduría de la madre que compartía con la hija cuando era adolescente y le enseñaba a coser y bordar para preparar su ajuar para el matrimonio. También, una vez tenían hijos/as, no había tantas tiendas de ropa sino que las madres cosían la ropa que sus hijos llevaban: faldas, camisas, pantalones… hasta ropa interior!!!
Como nos atrevemos con todo, nos animamos a coser unas bolsitas donde luego metemos hierbas aromáticas y nos servirán para perfumar los armarios (esto también lo hacían antiguamente).
Así que cada uno con su aguja, hilo y tela… a dar puntadas para cerrar los sacos por ambos lados.
Nos han sorprendido mucho, no han requerido ayuda más que en momentos puntuales para enhebrar la aguja, hacer algún nudo al hilo… y ahí que se han puesto manos a la obra sin dar puntada sin hilo. ¡Hasta nos ha dado tiempo a animarnos a practicar a coser a máquina, qué lujo! Más de uno/a está pidiendo ya un kit de costura para casa ¡un buenísimo ejercicio de mindfulness!
Y así han quedado…
RELATOS DE NUESTROS ABUELOS
Recuerdos de mi infancia, Yayo abuela de Jacob, nos cuenta cómo se divertía cuando era pequeña, contándonos algunas de sus aventurillas que han conseguido sacar la sonrisa de todos, como aquel paseo en barquito por el Guadalquivir. Como también pinta en acuarela, ha traído algunas ilustraciones infantiles que ella misma ha pintado y que ha encandilado al auditorio.
Mi infancia y cómo llegué a ser enfermera, a cargo de Paco y Aurora, abuelos de Maxi y Antonio. Paco nos ha contado su infancia en Badajoz, y como allí jugaba, por ejemplo, con coches de piedra que inventaban y circulaban por carreteras que pintaban en el suelo; cómo llamaban con un teléfono de cuerda a otra ciudad; como jugaban en la era y en el cortijo de su infancia. ¿Bueno, y cómo su madre se enteró que estaba embarazada de mellizos! jajaja. Aurora nos ha relatado su casi inmersión en la docencia y cómo finalmente decidió estudiar enfermería lejos de su tierra natal, sus primeras prácticas en la Cruz Roja (a pesar que no le gustaba ni ver un pollo muerto, jajaja esto ha sido muy gracioso) y cómo fue su inicio en el mundo de la enfermería en un pueblito donde hacía «un poco de todo».
Cómo era en nuestra época y su pasión por la acuarela, a cargo de Elena y Miguel Ángel, abuelos de Lucía. El abuelo nos cuenta cómo fue su infancia, con sus hermanos y amigos, cómo y donde estudió medicina, pero lo más gracioso ha sido el relato de su corta carrera eclesiástica por una hazaña que su madre nunca creyó. Elena nos ha relatado que es la mayor de cinco hermanos, la única hija y que su padre hizo una fiesta cuando se enteró que el segundo era un niño. Nos ha contado cómo llegó a ser licenciada en medicina dermatológica y que, por motivos personales, ahora siente una verdadera pasión por la acuarela cuya práctica le resulta terapéutica y con la que hace verdaderas exposiciones de arte.
La primera fotografía en color en Granada, por Fernando, abuelo de Nacho Q. El abuelo de Nacho nos cuenta que su padre, bisabuelo de Nacho, empezó trabajando en la tienda que aún está abierta junto a la Puerta del Vino de la Alhambra, que luego tuvo una tienda de fotografía en el centro de Granada, cómo se le ocurrió poner el nombre artístico basándose en una marca de fotografía conocida de la época, que era autodidacta y se le ocurrió inventar un artilugio para agilizar las fotos de carnet, que consistía en un panel con varios departamentos detrás del cual estaba su madre, el mecanismo consistía en que el hacia la fotografía e introducía la placa o negativo por uno de los buzones, su madre las revelaba y hacia las fotos, que salían húmedas, se recogían y se introducían por otro casillero para secarlas y ya salían terminadas para entregar… Inventó más cosas para hacer más competitivo su negocio ¡Qué creatividad!
El día de hoy ha estado protagonizado por todos ellos : nuestros abuelos y abuelas que nos han hecho vivir una jornada cargada de historias y mucho cariño, dejando una huella imborrable en todos y cada uno de nosotros.
GRACIAS a todos los abuelos y abuelas que nos regalan recuerdos para guardar en el corazón.
P.D.: el viernes tenemos verbena y merienda para disfrutar abuelos y nietos juntos, están TODOS invitados. Agradecemos nos digáis antes del jueves si van a venir (y cuantos de ellos) para poder organizar la merienda!
Juanjo y Laura,
Tutores segundo ciclo.