Familias como adultos responsables que somos de su bienestar, lo fundamental es que seamos capaces de transmitir calma y tranquilidad y, para ello, hay que darle importancia al autocuidado.
Vamos a tener que lidiar con el miedo y el enfado, propio y ajeno. Es completamente normal sentir esas emociones, el problema viene con lo que hacemos cuando nos invaden. Reconocerlas será el primer paso; comunicarlas, pedir espacio y tiempo, el segundo. Todo esto como personas adultas que somos, pero siendo conscientes de que a los pequeños de la casa no podemos pedirles tanta regulación emocional.
Sin embargo, no nos olvidemos, somos el espejo en que se miran, y en función de como nos vean, asà conseguiremos que soporten lo mejor posible la situación.
Os remito al blog de la clase verde donde Esther ha enlazado un artÃculo muy interesante sobre este tema.
Ya llevamos dos semanas con esta especial situación de confinamiento y algunos de los efectos fÃsicos y psÃquicos se empiezan a notar. Tenemos que seguir en la lÃnea del pensamiento positivo y proactivo, asà como de una mayor capacidad de flexibilización cognitiva que nos permita nuevas herramientas de adaptación para las distintas circunstancias adversas o incómodas que se nos presentan en el dÃa a dÃa.
La importancia de realizar ejercicio fÃsico de manera regular no es discutible ya a dÃa de hoy. Alberto (nuestro profe de Educación fÃsica) os deja algunas actividades para realizar con vuestros peques en el fin de semana:
En una caja de cartón o en una cesta, mete todo lo que se pueda usar para hacer pequeños juegos de rol. Una vieja peluca de carnaval, una capa, un camisón, un sombrero, un par de gafas de plástico… Cualquier accesorio para disfrazarse será útil.
¡Espero que os sirva y ayude! Y nos vemos pronto por el cole.
Un saludo, Alberto Castro.
Tras estas recomendaciones para realizar actividad fÃsica en casa, y como los dÃas se hacen largos, la tecnologÃa está siendo algo mucho más presente en nuestras rutinas. Os dejo un capÃtulo de dibujos animados que ofrece una visión equilibrada para un uso responsable de la misma, enfocada a los más pequeños.
Y por último, como soy consciente de la montaña emocional en la que muchos de «mis niños» deben estar subidos en estos momentos, y sabiendo que en clase trabajamos mucho ese tema, les dejo este precioso cuento «Monstruo de colores y el coronavirus», para ellos.