El viernes pasado realizamos nuestra salida trimestral, junto al grupo de 4º EPO, a Merca Granada.
Como ya os he ido adelantando en varias entradas del blog, hemos realizado un trabajo previo en cuanto a normas inherentes al lugar a visitar y sobre todo en cuanto a contenidos referidos a alimentos. Hemos podido aprender a diferenciar si los alimentos son de origen vegetal o animal, si todos los alimentos que conocíamos eran materias primas o por el contrario eran derivados de algún otro. También, con la colaboración del grupo de 4º EPO, hemos aprendido ciertas propiedades de algunos alimentos que podemos encontrar en nuestro entorno más próximo, la vega de Granada.
El día en cuestión, salimos del centro en torno a las 9,30 horas y decidimos mezclar ambos grupos para que la experiencia fuese más enriquecedora aún.
Una vez allí nos recibió Rafa, que fue el encargado de guiarnos durante toda la visita. Antes de comenzar a explicarnos de manera general en qué iba a consistir ésta, nos hizo ponernos unos chalecos reflectantes para que no pasásemos desapercibidos, ya que el lugar estaba bastante transitado.
Luego nos explica qué vamos a ver a lo largo del recorrido que realizaremos, le formulamos algunas cuestiones generales y nos tomamos un deliciosos tentempié (mandarinas y uvas), que nos regala el dueño del puesto de al lado.
Nos vamos deteniendo a lo largo de algunos puestos y Rafa nos va comentando curiosidades como: que existen aproximadamente 4000 variedades distintas de patatas, que existen las nísporas de invierno y se detiene en las propiedades más comúnmente conocidas de algunos vegetales y frutas, en función del color que presentan en su interior. Los divide en cinco grupos: los de color naranja-amarillo, blanco, rojo, verde y morado.
Una vez visitada la nave de las frutas-verduras, nos desplazamos hasta los contenedores de reciclaje para ver cómo clasifican los residuos generados y cómo no coinciden exactamente con los que nosotros ya conocemos.
Visitamos el BANCO DE ALIMENTOS y nos cuentan la labor tan importante que desarrollan ahí los voluntarios y voluntarias cada día. Nos informan acerca de las distintas posibilidades que existen para que lleguen hasta allí los alimentos que queramos aportar, qué tipos de alimentos recogen y cómo son distribuidos entre los más necesitados.
En la visita a la nave del pescado nos encontramos que «ya estaba todo el pescado vendido». Rafa nos explica el porqué y hablamos acerca de la labor que realizan los barcos pesqueros y toda la cadena de producción posterior, para que el pescado pueda llegar a tiempo cada mañana a las pescaderías, en el mejor estado de conservación posible y muy fresco. También nos dice que el que no se vende, pasa a la cámara de congelación, en la que permanece una jornada y si ya no se vende se debe tirar. Tuvimos la oportunidad de encontrarnos con el personal de limpieza en plena faena y también nos explicaron porqué se debe limpiar tan rápido y de esa forma.
Por último visitamos el aula destinada a la visita de los colegios, en la que aprendemos algunas cosas curiosas, entre las que podríamos destacar:
- Porqué el pescado es por su lado superior gris-azulado y por el inferior blanco. Preguntad a ver qué os cuentan (aunque es algo difícil la explicación).
- Cómo diferenciar un pescado blanco o azul. Ésto quizás lo recuerden con mayor facilidad.
Como cierre de la visita nos proponen un juego: «comer a ciegas», en el que unos voluntarios y voluntarias, súper-valientes prueban distintos alimentos y deben decirnos si les gusta o no y si saben cuál es.
Cómo podéis comprobar fue una salida muy divertida y en la que aprendimos un montón de cosas.
Hoy en la asamblea, gana por goleada el ir acompañados por los mayores, el trayecto en bus y probar alimentos con los ojos cerrados.
Seguimos cambiando el agua a nuestras aceitunas, que parece ya van perdiendo algo de amargor, siendo el equipo 3 el encargado de esa tarea esta semana.
Como nuevas propuestas de juego han salido hoy: las tiendas y la selva tropical.
¡A ver qué nos depara la semana!,
Esther Justicia.