Comenzamos nueva semana y nueva propuesta de juego/trabajo.
Las aportaciones de casa en relación a los médicos han sido muy numerosas, la gran mayoría del grupo ha traído algo así que, el juego ha sido muy variado y se ha mantenido constante durante bastante tiempo. Hemos tenido instrumental médico, libros de consulta, cuentos, peluches, bebés, disfraces …
La clase se ha dividido en dos grandes grupos bien diferenciados: «los y las médicos» y «las y los veterinarios». Antes de comenzar han decidido qué papel o rol iban a desempeñar y hemos acordado qué espacio iba a utilizar cada grupo, para no crear interferencias.
Algunos han permanecido constantes en sus roles y otros en cambio han cambiado incluso en más de tres ocasiones. Los conflictos acontecidos han sido tratados en gran grupo y hemos intentado sentar las bases para que no vuelvan a darse (son derivados en la mayoría por la impetuosidad en los movimientos, que desemboca en «mini-agresiones» involuntarias).
En la organización de espacios han diferenciado entre la consulta, la sala de espera y la sala de curas (con camilla incluida). Las atenciones han sido de todo tipo, desde partos, torceduras o dolores de barriga, hasta roturas de cuernos de rinoceronte por pelea, otitis en un gato o las pocas ganas de comer del cerdito.
Mañana continuaremos con la propuesta, tratando en asamblea todos los conceptos que conlleva intrínsecos. Pasaremos «de puntillas» por el tema del cuerpo humano y los bebés, ya que serán futuras conferencias de experto.
En el patio combinamos el juego libre con la recogida de semillas de caléndula, que próximamente sembraremos en el semillero.
NOTA: Esta semana no hay clase el viernes.
¡Hasta mañana!,
Esther Justicia.