¿QUÉ TAL ESE PUENTE?

Tras estos días sin cole, hemos vuelto cargados de energía para afrontar una nueva semana. Como no podía ser de otra forma, hoy dedicamos la asamblea de inicio a contarnos todo lo que hemos hecho en el «puente». Ha habido varios viajes, visitas a los abuelos y abuelas, celebraciones de cumpleaños y mucho juego en casa también.

En cuanto a los objetos que han aportado ha habido gran diversidad. Ha habido un juego de construcción espacial, un montón de enseres para mudarse de casa, un mini-ordenador y un plano con entradas de visita a la Sierra de Cazorla. Tras los comentarios y la puesta en común, no ha habido consenso en el juego a realizar ya que no ha salido ningún centro de interés común. Hoy jugamos de forma libre, posibilitando una interacción libre con todos los objetos del aula/casa y explorando las distintas posibilidades de juego simbólico que nos ofrecen.

A la hora de la asamblea de comunicación, no tenían muy claro (la gran mayoría) el juego que habían llevado a cabo, ya que no han permanecido constantes en una misma propuesta ni tampoco han mantenido las agrupaciones entre iguales.

Para la representación gráfica utilizamos los rotuladores finos, intentando aplicar la presión necesaria para no estropear la punta.

Hace días que os quería trasladar estas líneas acerca de «los mandalas», como complemento al tratamiento de la gestión emocional, que de forma transversal llevamos en el aula, y acompañando también a la práctica del yoga o el mindfulness.

Andrea lleva varios días trayendo a clase un libro que los contiene y han sido muchos los interesados en ellos.

Se trata de una herramienta o recurso destinado a la apertura mental y relajación del alumnado y que nos permitirá adquirir mejores condiciones de calma y atención para abordar el esfuerzo cerebral.

Según Marie Pré (maestra, psicóloga e investigadora  en los campos del funcionamiento cerebral, la neuropedagogía y técnicas de relajación cerebral): «La palabra mandala designa una imagen organizada alrededor de un punto central. Es una manifestación simbólica de la psique humana. En todas las épocas, los hombres crearon mandalas: planos de ciudades, decoración de armas, joyas, vestidos y rosetones de catedrales. Numerosos ejemplos de mandalas se encuentran en la naturaleza, desde la organización de las flores hasta la del sistema solar. Los niños los dibujan espontáneamente: es la expresión de la unidad de su ser.

El mandala tiene una eficacia doble: por una parte, restablece y conserva el orden psíquico y, por otra, el recuerdo del centro, implícito en todo momento, reúne y reequilibra.

Indagar en este tema les ayudará a organizarse, a evitar la dispersión, a consolidarse y a concentrarse, para conseguir mejores resultados».

La presentación «formal» de este recurso pretende acercar al alumnado a la forma de proceder para su realización y por otro lado a la consigna de ser una actividad espontánea de rearmonización que nunca sea obligatoria.

Sin duda los mandalas son herramientas que sirven para trabajar elementos como el orden y la concentración o atenciónla paciencia y la perseverancia, y esto lo logran de una forma lúdica.

A continuación os expongo la forma de proceder para que lo podáis poner en práctica en casa, puede ser una actividad de relajación espontánea muy eficaz.

  1. El niño/a debe escoger de entre unos cuantos, el dibujo que más le llame la atención en ese momento.
  2. El lugar de realización debe ser tranquilo y exento de interrupciones.
  3. Debe tener a su disposición una amplia gama de colores y útiles para colorear.
  4. Puede transformar el dibujo y añadir todos los elementos que desee.
  5. El trabajo puede constar de varias sesiones.

Si lo que queremos es que exterioricen sus emociones, deberán colorearse desde dentro hacia afuera. Si por el contrario queremos conseguir una mayor percepción del yo en este momento, lo harán de fuera a dentro.

Espero que os resulte de utilidad.

Esther Justicia.