Elisabeth ha escogido este tema para poder contarnos todo lo que sabe acerca de estos animales, tan típicos de la costa de Maine, las langostas.
Divide su conferencia en los siguientes puntos, bien definidos y que nos ha transmitido con mucha claridad: partes de su cuerpo, dónde viven, cómo crían, la muda de su caparazón, la pesca y cocinar/comer langostas.
- Partes de las langostas:
Estos animales marinos, tienen cinco pares de patas. Cuatro de ellos los utilizan para andar y el otro (las delanteras) para cazar. A éstas últimas, además de patas se les puede llamar pinzas. Una de ellas la utilizan para romper su comida y la otra para cortar.
Su cola les ayuda a nadar, aunque también tienen unas aletas que les facilita el nado.
También tienen un abdomen y un tórax. Como curiosidad nos aporta que aunque tienen dos ojos, no ven muy bien. Utilizan sus antenas para oler, tocar y cazar.
- Dónde viven:
Pueden vivir en agua fría y caliente. Viven en el suelo y les gusta esconderse debajo de las rocas. Las langostas que de agua fría son las que más conocemos, las de agua caliente no tienen pinzas y sus antenas tienen espinas.
- Cómo crían:
Las hembras llevan muchos huevos a la vez, dentro de su cuerpo durante 9 meses y otros tantos, fuera del mismo.
Una vez que ha pasado este tiempo los suelta y se quedan flotando en el agua. La mayoría son comidos por otros peces y muy pocos llegan a ser adultos.
Por eso existen granjas de langostas.
- La muda del caparazón:
Para crecer, las langostas tienen que mudar el caparazón. Lo hacen muchas veces a lo largo de su vida (más cuando son pequeñas como nosotros y una vez al año cuando son mayores).
Primero se quitan la concha y mientras les crece la nueva, se esconden debajo de rocas para protegerse. Mientras tanto se comen la concha antigua.
- La pesca de langostas:
Se arrojan unas trampas al mar, identificadas con boyas de diferentes colores, ya que es ilegal tocar las boyas o trampas que no sean de su propiedad.
Estas trampas son como una cajita que tiene dos habitaciones. Una que es por donde entran (y de la que pueden escapar) y otra que es donde se encuentra el cebo, en la que una vez que se entra, ya no se puede escapar. Salvo que sea lo suficientemente pequeño como para colarse por un agujero incluido para tal fin.
No se pueden pescar langostas demasiado pequeñas, así que se utiliza un instrumento para medir desde los ojos hasta el final del tórax, si son más cortas de esta medida, deben arrojarlas de nuevo al mar.
Para que fuese más visual y significativa la explicación, Elisabeth nos ha hecho una simulación que ha resultado muy ilustrativa.
- Cocinar y comer langostas:
Las partes que se suelen comer son las pinzas y la cola. Hay que hervirlas cuando aún están vivas, porque si no, nos podemos poner enfermos.
Cuando las cocinamos, doblan su cola debajo de su cuerpo y se ponen de color rojo.
Están muy ricas con mantequilla y limón, o solamente con vinagre. Aunque también se pueden comer frías en un sándwich.
En los restaurante puedes pedir langostas de concha dura o blanda. Para sacar la langosta de su concha, hay que usar instrumentos especiales y un babero para no mancharse.
Como no, Elisabeth nos demuestra la habilidad que tiene para realizarlo y nos regala un simpático babero que podemos llevar a casa.
¡Felicidades por esta estupenda exposición!
Esther.