Estimada familia:
A la conclusión del primer trimestre e inicio de este segundo quiero explicar las siguientes vivencias que se han tenido en el área de educación física.
La clase roja ha terminado el trimestre con un aceptable comportamiento grupal, y su implicación en las tareas ha ido evolucionando significativamente a lo largo del curso.
El programa de trabajo ha sido una continuación y refuerzo de lo iniciado en cursos anteriores y en el actual, ya que tanto los contenidos que hemos afrontado durante este curso, como los que en general van a tratarse durante toda la etapa de infantil (clase naranja, roja y verde) son cíclicos. Es decir, durante los tres cursos que componen la mencionada etapa debemos incidir en aspectos fundamentales para su correcto desarrollo y evolución psicomotora.
Las actividades son globalizadas y se plantean de modo que en cada actuación intervengan varios contenidos, aunque en ocasiones incidamos más en unos sobre otros. Un buen ejemplo de como se puede implicar y captar la atención de nuestro alumnado es la realización de “circuitos” de habilidades en las que por medio de una historia o cuento los introducimos en un viaje o aventura en el que motrizmente han tenido que saltar (en carrera, desde parado, diversos obstáculos, de aro a aro, disociar a que color podían saltar y a cual no, etc.), han tenido que reptar (imitando diversos animales o situaciones), han tenido que girar, han tenido que lanzar (todo tipo pelotas, frisbees, aros, etc.) han tenido que recepcionar (con el trabajo de estructuración espacio-tiempo que conlleva), han tenido que realizar equilibrios, han tenido que realizar ejercicios sencillos de coordinación y otras habilidades más complejas (como el bote o la conducción que se han iniciado sin ninguna otra pretensión que el de probarlo de un modo natural y sin ninguna exigencia de forma).
También se han realizado muchos juegos sencillos con reglas básicas, para ir asimilando el respeto a las mismas y el disfrute que dichos juegos y sus condiciones nos ofrecen si asumimos dicha reglamentación. Los juegos que ponían fin a las sesiones, en los que se pretende bajar el grado de excitación para retornar al aula de un modo tranquilo, han tenido como eje contenidos como la discriminación visual o auditiva, la relajación segmentaría, el conocimiento corporal o la orientación espacial.
Por último mencionar que en casi todos los juegos es importante utilizar recursos de “animación” e implicarse personalmente en los mismos para dinamizar y encauzarlos, y para que la motivación y participación de todos los niños y niñas sea satisfactoria.
Un cordial saludo.
Alberto Castro. Maestro de Educación Física.