Con este trabajo, pretendemos practicar el movimiento del cuerpo humano y la textura visual. Para el movimiento, nos inspiramos en los diseños del artista neoyorquino Keith Haring; el artista traza las figuras humanas en situación de movimiento, a través de rudimentarias líneas continuas. Sus características figuras, forman el leitmotiv de su obra. A través de imágenes esquemáticas y sencillos símbolos, Haring relata historias de gran fuerza comunicativa.
Comenzamos la actividad visualizando imágenes de la obra de Haring. Cada alumno hace varios bocetos de cuerpos en movimiento en su cuaderno de artística. Dibujan el diseño elegido en un soporte que tiene tres dimensiones, las aprovechamos para el diseño. Recurrimos a la textura visual, para la decoración de fondos y figuras. Recordamos los distintos tipos de líneas que podemos utilizar. La combinación de colores contribuye, además, a realzar las zonas decoradas.
Enfatizamos el interés por el movimiento en el montaje final de la obra. Recortamos figuras en cartulina negra y las situamos en una postura de interacción con los cuadros. Nuestra instalación es una composición que integra cada obra, unificadas por la expresión del movimiento.
Ana Martín