Archivo de la etiqueta: Autorretrato

AUTORRETRATO

Antes de abordar la tarea del autorretrato, el grupo de cuarto también visita el espejo para mirarse. Además de acicalarse, se centran en tomar medidas de las distintas partes de su rostro y comprobar sus peculiaridades.

Las características físicas en los dibujos del grupo de cuarto, comienzan a emerger: los ojos claros, la tez morena, el pelo liso…, incluso la timidez o la aflicción se intuyen en algunos rostros.

«Éste que veis aquí, de rostro aguileño, de cabello castaño, frente lisa y desembarazada, de alegres ojos y de nariz corva, aunque bien proporcionada; las barbas de plata, que no ha veinte años que fueron de oro, los bigotes grandes, la boca pequeña, los dientes ni menudos ni crecidos, porque no tiene sino seis, y ésos mal acondicionados y peor puestos, porque no tienen correspondencia los unos con los otros; el cuerpo entre dos extremos, ni grande, ni pequeño, la color viva, antes blanca que morena; algo cargado de espaldas, y no muy ligero de pies; éste digo que es el rostro del autor de La Galatea y de Don Quijote de la Mancha, y del que hizo el Viaje del Parnaso, a imitación del de César Caporal Perusino, y otras obras que andan por ahí descarriadas y, quizá, sin el nombre de su dueño. Llámase comúnmente Miguel de Cervantes Saavedra…»

Novelas Ejemplares, Miguel de Cervantes.

El retrato literario, descubre al personaje mediante palabras, lo hace visible, cercano. Los alumnos de cuarto se han hecho visibles mediante sus dibujos.

Ana Martín

AUTORRETRATO

Antes de comenzar a dibujar, todos quisieron ir a mirarse al espejo.

Un sentimiento, mezcla de euforia y nerviosismo, se apodera de ellos. Cuando se asoman al espejo, les gusta hacerlo en grupo, se miran los unos a los otros y se acicalan como si les fuésemos a hacer una fotografía. «Me llevo el papel y me copio», decían algunos, pronto desisten y vuelven a la clase.

En el retrato literario, el autor, mediante un  recurso teórico nos presenta al personaje, su físico y su personalidad quedará reflejada en un espejo de palabras.

Tichborne era un esbelto caballero de aire envainado, con los rasgos agudos, la tez morena, el pelo negro y lacio, los ojos vivos y la palabra de una precisión ya molesta; Orton era un palurdo desbordante, de vasto abdomen, rasgos de una infinita vaguedad, cutis que tiraba a pecoso, pelo ensortijado castaño, ojos dormilones y conversación ausente o borrosa”.

Fragmento de El impostor inverosímil Tom Castro, Historias universal de la infamia, de Jorge Luis Borges.

Mediante el dibujo artístico los trazos, las sombras y el color son las únicas herramientas para tratar de reflejar nuestra personalidad física, no es tarea fácil, por ello la abordamos cada año.

Ana Martín

AUTORRETRATO

Estos son nuestros alumnos de quinto. Mientras trabajaban, unos se mostraban tímidos, otros atrevidos, sagaces, recatados, inquietos, resolutos, indecisos, complacientes, dubitativos, desenvueltos, osados, pero todos han sido  bastante reflexivos.

Han tomado medidas  y han distribuido los elementos de sus rostros para tratar de reproducir lo más fielmente posible, la imagen que veían en sus fotos.  La tarea de dibujar su autorretrato les supone realizar un gran esfuerzo.  

¡Habéis hecho un gran trabajo!

Ana Martín

AUTORRETRATO

La realización del autorretrato, la planteamos cada curso, como un sistema útil para aprender a dibujar el rostro humano. Esta triple faceta de autor, sujeto dibujado y espectador del resultado, conlleva una gran dificultad e implica un alto esfuerzo de análisis personal de las cualidades físicas y de autoconocimiento.

La frescura de los dibujos en el primer ciclo da paso a la inquietud por el resultado en el segundo y el nerviosismo por ajustarse a la realidad, en el tercer ciclo. Os remito a la entrada que sobre este tema publiqué en el apartado de comunicaciones con fecha de 30 de septiembre de 2013.

Aunque cada niño sigue su propio proceso, en general, es una actividad que desata muchas emociones. La imagen que tienen los demás sobre mí me afecta, de esta forma cualquier comentario que hagan sobre mi dibujo me hace dudar. Otras veces juzgo como espectador el resultado de mi trabajo. “ Si parece que soy una adulta” comentaba una alumna de primero. “Parezco un adolescente” decía un alumno de cuarto.

Los trabajos mostrados corresponden a alumnos de primero a cuarto.

Ana Martín