¡Buenos días amig@s! Hoy nos hemos visto un ratito, ¿lo habéis pasado bien? a nosotros nos encanta veros y que estemos juntos…
Como hoy ya hemos trabajado un poquito en la sesión a través de Zoom, las propuestas que os traemos son algo más relajadas, y si queréis las podéis llevar a cabo durante la tarde.
Familias, para empezar os traemos un experimento de observación en el que el resultado no es instantáneo, debéis animar a vuestros hijos/as a que tengan un poquito de paciencia y esperen los resultados. Podéis prepararlo cuando estéis en la cocina, antes de empezar a preparar la comida. Solo necesitaréis algunos recipientes transparentes (vasos altos), colorante alimentario (aunque también puede servir témpera líquida muy diluida), agua y algunas hojas de lechuga o col blanca.
En cada recipiente debéis diluir un color diferente en agua, y en cada un de ellos introducir una de las hojas de la lechuga asegurándoos que la parte del tallo sea la que queda sumergida en el agua coloreada.
Pues bien, debéis dejarlas así durante un día y una noche completas, cuando os levantéis por la mañana, descubriréis «la magia». Las hojas habrán quedado coloreadas cada una de su color correspondiente, ¡seguro que se sorprenderán con el resultado!.
¿Y si ya que estamos en la cocina jugamos a adivinar el nombre de algunas verduras?
Antes de jugar al juego que os traemos, os proponemos que abráis la nevera y realicéis un repaso con vuestros niños/as de todas las verduras y hortalizas que encontréis. Es muy positivo que desde que son pequeños se habitúen a saber qué es lo que comen, cómo se llama el alimento y por qué es importante que lo incluyan dentro de nuestra alimentación diaria. El secreto de una buena alimentación está en crear un hábito adecuado desde que nacemos.
Y como el día va de colores…, ¿hay algo mejor que continuar aprendiéndolos a través de una canción? Ya nos contaréis qué os parece, a nosotros nos encanta.
Amarill@s seguimos con música, pero en este caso en inglés. Es muy importante saludar a los demás, así les demostramos nuestro cariño y nuestra consideración cuando nos encontramos con ellos. ¿Verdad que a todos os gusta que os saluden?, pues de nuestra parte ¡HELLO!
Y con esto y un bizcocho…, nos vemos mañana a las ocho (bueno, un poquito más tarde que no es necesario madrugar tanto, ehhhh).
¡Besos y abrazos para tod@s!