¡Buenos días amarillitos! Hoy no se ha despertado el sol, se ha quedado dormido y hemos amanecido con un cielo lleno de nubes…, pero a nosotros no nos importa, porque lo vamos a pasar igual de bien 😉
Empezamos el día con un poquito de ritmo con el que además de trabajar musicalmente, pondremos en marcha nuestro cuerpo y ejercitaremos habilidades como la coordinación y la espacialidad. Podéis realizar estos juegos con vuestros hermanos mayores o con papá y mamá, igualmente lo pasaréis fenomenal:
Ahora os proponemos otra forma de trabajar la motricidad y la coordinación óculo manual, pero esta vez unida a un taller…
Os vamos a enseñar una divertida forma de reutilizar los rollos del papel higiénico una vez están acabados, así además generamos menos residuos que van al cubo de la basura. ¡Un taller útil y entretenido! Seguro que vuestros pequeños pasaran ratos y ratos jugando con él, solamente tenéis que hacer lo que muestra la foto, es muy sencillo. Si en casa no tenéis canicas, podéis hacer una bolita con papel de aluminio, ¡creatividad al poder!
Para el trabajo lectoescritor, en esta ocasión os proponemos una idea que creemos que os va a gustar y os va a sacar de la rutina. Se trata de inventar nuestros propios cuentos partiendo de una serie de orientaciones dadas. Como podéis ver en la fotografía, han usado piedras de la playa, nosotros en casa (si no tenemos…) podemos usar trocitos de papel donde dibujaremos lo que queramos. Es importante que haya varias tarjetas de personajes, otras de lugares y otras de acciones, de esta forma podréis dar forma a vuestra historia «dentro de vuestra cabeza». Debéis dar la oportunidad también a vuestros hijos para que inventen, se trata de un ejercicio buenísimo para fomentar la imaginación y el pensamiento creativo. ¡Ánimo, seguro que sois unos magníficos cuentacuentos!
Y para seguir desarrollando nuestra parte artística, hoy os traemos un taller con el que cumplimos también los objetivos propios de la pintura de mandalas, pero esta vez aplicados a través de un dibujo mural en el que podéis colaborar toda la familia.
Solamente tenéis que realizar trazos desordenados sobre un papel de manera que consigáis un dibujo entramado en el que colorearéis cada una de sus partes de un color diferente. Podéis usar el material que más os guste: lápices, rotuladores, ceras, acuarela… Lo importante en ningún caso será el resultado, sino el proceso, el momento que compartiréis. Y si además queréis que sea una actividad que os proporcione calma, podéis poner de fondo la siguiente selección de música:
Con esto nos despedimos hasta el viernes…, esperamos que disfrutéis de todas las actividades y que os animéis a contarnos cómo os va a través de los comentarios al blog.
¡Besos para todos y todas!