Hola, con las primeras lluvias aparecen los caracoles y los encontramos en el jardín.
Observarlos y seguir sus intrepidantes salidas del contenedor; contarlos y buscarlos por todas las superficies es un gran juego.
El juego de aros es muy atractivo para empezar la mañana, hay que jugar mucho para coger grandes habilidades.
Después del aseo entramos en clase y les digo «Ea, ea, ea, los niños y las niñas a la asamblea»»fine, fine, fine assembly time»; ¡y responden así de bien!
Lindley les cuenta las peras en orden ascendentes y descendente y a ellos les parece algo mágico.
¿A qué queréis jugar? «Coches, barco y a los conejos». Han sido las propuestas de hoy. Juegan con gran armonía aunque siempre hay que recordar que hay mucho material y hay que compartir.
Poco a poco y día a día.
Un beso, hasta mañana.
Matilde Hidalgo.
P:D por la tarde bailamos con el disco de Clara y hacemos pompas con el pompero de Pablo.