Esta mañana empiezan a jugar con ganas y alegría, poco a poco van llegando todos y jugando a diferentes juegos.
Paula trae un libro sobre los besos, yo trato de leerlo porque a mí me encantan los besos, pero la llegada de otros compañeros nos lo impide.
Charito llegó y continuó con otro grupito pintando sus camisetas para el carnaval; mientras Charito hace preparativos, nosotros nos vamos a la asamblea y me piden que les cuente otra vez el cuento del «Fantasma en apuros», esta vez no se lo leo, sino que se lo cuento mas esquemático, con grandes gesticulaciones y enseñándoles las imágenes, os aseguro que en sus caras se podía leer eso de «¡Ah! ¡¿si?! ¡Ya entiendo lo que le pasó!»
En esta edad los cuentos se recomienda que estén llenos de acción (más verbos que adjetivos, más acción que descripción), mas bien breves y a ser posible con rimas y repeticiones.
Espero que mañana podamos leer el cuento de besos.
Juegan a correr y esconderse debajo de la mesa, yo les propongo irnos al parque y jugar a correr y escondernos en las casitas y así lo hacemos. Para mi sorpresa cuando salimos con un día espléndido, les da una «calma chicha» y se relajan jugando con los cubos y las palas. Eso sí, antes de volver a clase les propongo correr detrás de mí y ¡claro que se animan! ¡Damos tres vueltas al parque!
Mañana seguimos.