Esta mañana realizamos un taller de cocina con nuestros niños y niñas. Tomando como «excusa» la fiesta de Carnaval, aprovechamos para «cocinar» una receta dulce aunque saludable 😉
Antes de bajar al comedor donde hemos realizado el postre, hemos hablado en clase sobre los ingredientes que formarían parte de nuestra receta, y sobre los pasos que íbamos a realizar. Después hemos escrito la lista de ingredientes, para que no se nos olviden……y por supuesto, nos hemos lavado las manos.
Una vez en el comedor nos hemos puesto los delantales y hemos comenzado con nuestra tarea culinaria. Hemos ido troceando la fruta que previamente habíamos lavado. Tod@s colaboran en esta tarea y disfrutan, aunque eso sí… muy concentrados.
Después, repartimos los palillos de las brochetas y acordamos que a cada persona le corresponderá 3 trocitos de cada una de las frutas (manzana, plátano, fresa y uva). Únicamente les doy una consigna: tenemos que ir alternando las frutas de manera que no pueden coincidir dos trocitos iguales juntos («no puedo poner manzana con manzana……por ejemplo).
Todos ensartan las frutas sin problema, en algunos casos con un poquito de ayuda, pero todas quedan fenomenal.
En el último paso las bañamos con un poquito de chocolate blanco (que yo me encargo de ponerles por encima) y ellos/as las espolvorean con coco rallado (sustituto de última hora de los fideillos de colores).
Y por supuesto, hemos probado todos los ingredientes. Esta tarde tomaremos nuestras magníficas brochetas en la merienda.
Loli Gálvez