Comenzamos la mañana con la lectura del cuento «Por cuatro esquinitas de nada», lectura muy recomendable para trabajar con los niñ@s el respeto a la individualidad de cada uno/a y las diferencias. A veces lo diferente asusta un poco…, pero debemos ser capaces de saber ver lo que puede aportarnos y con lo que puede enriquecer a nuestro grupo. Tod@s somos importantes.
También en la asamblea recibimos la propuesta de Leo P. de cuidar una planta desde su nacimiento. Nos ha traído una lata (que no es de conserva, jajaja), dentro tiene semillas, y viene preparada para que la reguemos y poco a poco podamos observar el crecimiento de una planta. Nos ha parecido una idea genial, y hemos aprendido que tenemos que regarla «un día sí, un día no», y cuando pase una semana más o menos, podremos ver la planta. ¡Qué bien!, muchísimas gracias Leo.
Por otro lado, voy a hablaros sobre la propuesta de juego mayoritaria esta mañana, aunque como podéis ver en las fotos cada uno ha invertido su tiempo en lo que más le ha gustado:
Desde el curso pasado la propuesta de juego de «leones» llamaba mucho la atención de nuestros niños y niñas (siempre capitaneada por Ana, forofa de estos animales…). Pues bien, hoy ha sido una propuesta de juego seguida por la mayoría, tanto es que el dibujo del juego lo hemos realizado sobre estos animales. En asamblea hemos estado hablando sobre el lugar en el que habitan estos animales, y sobre las diferencias existentes entre los machos y las hebras de esta especie (básicamente su tamaño, y la melena).
Por la tarde, mientras realizamos diferentes juegos por grupos con los que trabajamos la atención y la motricidad fina, escuchamos una de las canciones características de la película «El rey león» (¡les encanta!); aquí os la dejo para que la disfrutéis en casa.
Loli Gálvez